DESPLAZADO

La que cayó entre espinos, éstos son los que oyen, pero yéndose, son ahogados por los afanes y las riquezas y los placeres de la vida, y no llevan fruto. —Lucas 8:14

Siempre me he sorprendido por las malas hierbas. Usted puede tomar una pequeña flor, la planta en la ubicación perfecta, le echa agua, y se asegura de que no hay parásitos que la amenazan. Usted puede hacer todo lo posible por la flor, y esta crecerá lentamente. Pero entonces, en la misma cantidad de tiempo, un poco de hierba brota de una pequeña grieta en la acera y esa mala hierba ahoga la flor.

Pero la mala hierba no sale de repente de la tierra, agarra la flor, y empieza a sacudirla. El proceso es gradual. En primer lugar, existe una creciente flor, y luego aparece la maleza. Al día siguiente, la hierba está un poco más cerca. Y así sucesivamente hasta que la maleza comienza a enrollarse alrededor de la flor y le ahoga su crecimiento.

Eso es lo que Jesús estaba describiendo en la parábola del sembrador, cuando Él habló de aquellos que son ahogados por los afanes y las riquezas y los placeres de la vida, y no llevan fruto. Lucas 8:14 Esto no es algo que sucede de la noche a la mañana, sino que sucede en un período de tiempo.

También me parece interesante que son los "afanes y las riquezas y los placeres de la vida" que impiden la semilla de la Palabra de Dios maduren y produzcan frutos. Estos no son necesariamente cosas malas en sí mismas. Pero estas son las cosas buenas que se convierten en lo más importante y ahogan las cosas espirituales.

Esto no es una imagen de alguien que dice que no quieren orar, leer la Biblia, o ir a la iglesia. Más bien, este representa a alguien que piensa que estas son cosas buenas que hacer. Pero con el tiempo, empiezan a perder interés, y las cosas de este mundo se vuelven más importante para ellos que las cosas del espirituales Y eso es lo que les ahoga espiritualmente.
—Greg Laurie