ALGO TIENE QUE CAMBIAR

No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. Romanos 12:2

Cuando las cosas se ponen demasiado difíciles en nuestras vidas, nos encontramos diciendo: "Algo tiene que cambiar". Por lo general, no sabemos qué o cómo van a cambiar, pero sabemos que debe haber un cambio para que podamos sobrevivir. Alguien dijo que cuando nos hacen daño lo suficiente, cuando nos engañan lo suficiente, cuando ya estamos hasta el tope, cambiamos.

Sin embargo, no siempre es suficiente cambiar nuestro entorno. Los cambios más grandes y más importantes ocurren cuando nuestras mentes se renuevan y nuestra perspectiva cambia. En lugar de centrarnos en el problema, Debemos centrarnos en el Solucionador de Problemas, Jesús.

Si pensamos en ello, la mayoría de las cosas negativas de las que nos preocupamos son más terribles en nuestras mentes de lo que son en realidad - o nunca suceden. Cuando nuestra manera de pensar cambia, nuestros problemas cambian y se hacen manejables.

En Romanos 12: 2, dice que mediante el poder de la mente, podemos ser transformados. Qué tarea tan impresionante es transformar nuestra manera de pensar y cambiar nuestras vidas. ¿Cómo vamos a hacer eso? Meditando en la Palabra de Dios día y noche, creceremos espiritualmente a pasos agigantados. Mantener un diario nos mantendrá enfocados. Haciendo preguntas a Dios y esperando las respuestas. Di: "Señor, ¿qué significa esto? ¿Qué me estás diciendo en este pasaje? ¿Qué quieres que haga hoy?" Entonces escucha. Dios hablará a través de Su Palabra, a través de una canción, o a través de otra persona. Sólo necesitamos escuchar.

Otra cosa sucederá también. Nos encontraremos cambiando la forma en que manejamos la ira; La forma en que pensamos. Incluso nuestras oraciónes cambiarán. Ya no serán todo acerca de nosotros y nuestras necesidades, sino Cristo centrado en la renovación de nuestras mentes con la Palabra de Dios y la ayuda del Espíritu Santo.

Amado Dios, cambia mi vida hasta que me convierta en la persona que tu quieres que sea. Amén.