EL LENGUAJE UNIVERSAL

La Madre Teresa dijo una vez sobre su experiencia inolvidable en una familia pobre de Calcuta. Un día se enteró de que una familia hindú pobre con varios hijos estaban hambrientos durante varios días. Ella se apresuró a visitarlos, llevando en sus manos una bolsa de arroz para la familia. La madre de la familia se sintió agradecida por el saco de arroz.

La mujer hambrienta luego dividió el arroz en la bolsa en dos mitades y salió con una mitad del arroz.

Cuando regresó, la Madre Teresa le preguntó dónde había ido. La mujer respondió que ella fue a dar a una parte del arroz a una familia musulmana vecina que estaba en un estado similar de pobreza y el hambre. La Madre Teresa le conmovió el amor y la compasión de la pobre señora que le hizo compartir sus escasos bienes con sus vecinos hambrientos. Ella estaba feliz de ver a ellos disfrutar de la alegría de compartir.

El amor es el lenguaje que Jesús enseñó a sus discípulos como el medio universal para la evangelización. El amor puede ser escuchado por los sordos, vista por los ciegos y sentirse incluso por el recién nacido y los retrasados mentales.

Podemos dar sin amar; pero no podemos amar sin dar. El amor es dar todo lo que podamos. El amor es como una sonrisa - no tiene ningún valor a menos que sea regalado.

El psiquiatra estadounidense Karl Menninger (22 julio 1893-18 julio 1990) dijo, “El amor cura personas - tanto los que lo dan como los que lo reciben.”

Madre Teresa dijo: “No es lo mucho que tu haces lo que cuenta, sino cuánto amor usted pone en lo que hace.”

Debemos estar dispuestos a compartir nuestros bienes con los más necesitados.

1 Juan 3:18; Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.

1 Juan 4:16; Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él.