EL PODER DE LA ORACIÓN

Un granjero tenía dos hijas. La mayor de ellas se casó con un granjero. La hija más joven se casó con un alfarero. El padre solía visitar a sus hijas con frecuencia. Durante una de sus visitas, la hija mayor le pidió que orara por lluvias más frecuentes ya que sus cultivos estaban en gran necesidad de agua. Él estuvo de acuerdo. Luego visitó a su hija menor. Ella le dijo que ellos querían más sol para que sus ollas de barro se secaran al sol durante el endurecimiento. Ella quería que él orara por más sol sin lluvia. El pobre padre estaba en gran confusión sobre sus hijas que estaban pidiendo sus oraciones con peticiones contradictorias. Finalmente tomó una decisión audaz y oró: "Dios, haz lo que quieras. Hágase tu voluntad! "

Un niño puede ver un cuchillo afilado y brillante y llorar para conseguirlo como un juguete. Pero ningún padre amoroso le dará un regalo tan peligroso para un niño pequeño. Esto explica por qué muchas de nuestras oraciones no son contestadas inmediatamente. Dios, como nuestro padre amoroso, conoce nuestro futuro y otorga únicamente los dones que nos merecemos y lo que nos beneficiará.

Richard. C. Trench comentó: "La oración no es vencer la resistencia de Dios, sino cooperar con su buena voluntad".

William Cowper dijo: "Satanás tiembla cuando ve al más débil de rodillas ".

Dios habla por boca de Jeremías: Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis Jeremías 29: 11